Interpelaciones cruzadas y críticas. Eso es lo que se ha visto en los últimos días en el oficialismo desde que el ministro de Hacienda, Mario Marcel, ratificó el compromiso del Ejecutivo de presentar un proyecto de ley al Congreso Nacional en septiembre de este año que se haga cargo de la deuda universitaria, una de las promesas de campaña ícono del Presidente Gabriel Boric.
Uno de los conflictos lo protagonizó la presidenta del Partido Socialista Paulina Vodanovic, quien acusó que la condonación al Crédito con Aval del Estado (CAE) tiene «motivos electorales». Lo que fue rechazado tajantemente por La Moneda y por parlamentarios del Frente Amplio y el Partido Comunista.
Esta mañana, la timonel del PS en conversación con Radio Universo complementó sus dichos y recalcó que «a mí lo que no me gusta de esto es la presión al Gobierno, porque si nosotros tuviéramos los recursos como país, aquí no habría una discusión (…) creo que hacerlo a días antes de la Cuenta Pública, en segundo lugar hacerlo como una especie de pauteo al Presidente, me parece que es una irresponsabilidad frente al escenario económico que nosotros tenemos y es contra eso que yo me he manifestado».
Las declaraciones de Vodanovic nuevamente generaron ruido. La presidenta de la comisión de Educación de la Cámara, Emilia Schneider (FA), «descartó» estar «pautando» al Mandatario. En conversación con la misma radio, la parlamentaria explicó que “el debate respecto al fin de las deudas educativas se reinstala a raíz de una entrevista que da el ministro Marcel, también por los comentarios del ministro de Educación y la propia ministra Vallejo. Y ahora por la ministra Tohá”.
Argumentó que «este es un debate que lo instalan los ministros y ministras y muy bien que así sea porque tenemos que cumplir un compromiso con la ciudadania. Cerca de 2 millones de personas están en deuda con el CAE, con el Fondo Solidario, el Crédito Corfo, que están esperando una respuesta, una solución».
En esa línea, manifestó que «el Gobierno se compromete a tener un proyecto de ley que compromete, por una parte, un plan de condonación o reparación, como quieran decirle, yo creo que ese es un asunto de palabras, gradual y progresivo para las persona que tienen deuda educativa y por otro lado, plantear un nuevo mecanismo de financiamiento para la educación superior«. (Emol)