A casi dos meses de su regreso a Chile, tras estar detenido durante 23 años en Perú, Jaime Castillo Petruzzi hizo un llamado a conformar un Frente Amplio de convergencia de diferentes sectores sociales y políticos en pos del bien común.
En el marco de un conversatorio realizado en la librería Le Monde Diplomatique de Santiago, el ex MIR y uno de los líderes del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) instó a dejar de lado las diferencias y apostar por las grandes luchas en común.
“Basta con salir a las calles de Santiago y darse cuenta de que es urgente y necesario que todos los que reivindican un cambio político y social en Chile tienen la tarea de unirse y buscar puntos de convergencia”, afirmó Castillo.
«Torito», como le apodan, sostuvo que se debe “luchar por un cambio de sistema profundo”. “Lamentablemente priman los egoísmos, no el espíritu desinteresado de ayudar y servir al pueblo”, agregó.
Por esta razón, dijo que “en eso queremos aportar y creo que podemos hacer que algunas voluntades conversen, se conozcan, superen sectarismos y resabios que desde hace tantos años se arrastran, caudillismos dañinos y personalismos que no tienen nada que ver en esta situación, y busquen el bien común, que es lo que todos queremos: una sociedad más justa y más libre”.
En ese sentido, recordó que “(José Carlos) Mariátegui decía: ‘Todos nos une, nada nos separa’. Lo importante es entender el todo. Hoy día el todo es luchar contra el neoliberalismo depredador que está aniquilando el planeta, el continente y el país. El mundo está en un despeñadero”.
Respecto de cuál sería su papel dentro de este Frente Amplio, Castillo afirmó que “yo no estoy militando en ningún partido, pero quisiera jugar un rol como un compañero más, modestamente aportando. Si piden mi opinión, estar ahí; si piden un esfuerzo; estar ahí. Yo estoy a disposición de lo que diga la gente. Creo que mi deber es ese: pedir que se junten y crear las condiciones”.
PARTIDO POLÍTICO
Castillo, que se autodefinió como un militante de base, no descartó la posibilidad de que este Frente Amplio participe como un partido dentro de la institucionalidad actual y afirmó que todo deberá ser conversado y decidido por quienes conformen esta iniciativa.
“Si hay gente consciente que es capaz de articular un programa político que responda a las expectativas de las grandes masas, en eso podemos jugar un rol. No me cierro a nada, estoy abierto a todo lo que contribuya a romper este esquema político, social y económico. Hay que cambiar esta realidad”, recalcó.
Consultado sobre el descontento y desconfianza que existe hoy día en Chile, comentó que “no siempre las mayorías tienen la razón; por el contrario, generalmente son las minorías las que despiertan a las grandes mayorías. Y hoy día la fuerza está en los jóvenes, que son los que tienen que cambiar el mundo. No está en nosotros los mayores. Nosotros estamos ahí para decir por dónde no caminar, por dónde no hacer las cosas. Y para sugerir caminos y posibles ideas”.
Castillo fue condenado a 23 años de cárcel en Perú por su vinculación con delitos asociados al Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. Tras cumplir su condena, fue expulsado del país incaico y regresó a Chile el pasado 15 de octubre.
«NO ES TIEMPO DE LAS ARMAS»
Castillo, que aseguró que la revolución “no tan solo es posible, sino que es necesaria”, afirmó que en las circunstancias actuales no sería apropiada una política militar. “Eso es de acuerdo a los momentos políticos que se viven. Hoy eso no está a la orden del día. La evolución de las luchas populares y de las respuestas del Estado va a ir dando el camino por donde se van a ir necesariamente generando nuevas formas de lucha. Eso te lo va diciendo las necesidades mismas de la gente”, explicó.
En ese sentido, argumentó que “es todo un aprendizaje que tiene que hacer el pueblo en general. No podemos esperar a que la gente salga hoy día a hacer la lucha revolucionaria a las calles. Eso va contra toda lógica. Eso tiene que ser un flujo natural, un camino que el pueblo tiene que hacer. Y que llegado el momento, solito eso va a madurar”.
De todas formas, Castillo aclaró que “yo no me cierro a ninguna forma de lucha, eso lo decide la historia y los pueblos”. (La Nación)