Tras cinco años de investigación, y pese a que negó en innumerables oportunidades su participación en el homicidio de su esposa, finalmente el ingeniero Jaime Anguita confesó haber asesinado a Viviana Haeger. El caso se remonta al 29 de junio de 2010, cuando la contadora desapareció. Su cadáver fue encontrado casi dos meses después en la buhardilla de su residencia en Puerto Varas.
Anguita fue detenido durante la jornada de ayer en Puerto Varas por unidades de la Brigada de Homicidios (BH) de Osorno, luego de prestar una nueva declaración. Durante el interrogatorio, el ingeniero habría confesado también que actuó con la ayuda de un cómplice, quien también fue arrestado. Ambos serán sometidos a control de detención este mediodía: Anguita en la comuna de Puerto Varas y su cómplice, quien no ha sido identificado, en Puerto Montt.
MISTERIO DESVELADO
El caso se había convertido en un puzzle desde que fue hallado el cadáver de la profesional. Hasta ahora, Anguita había negado sistemáticamente haber tenido que ver con la muerte de su mujer. Un informe forense había determinado en junio de este año que la víctima había muerto por asfixia y reveló la participación de terceros en su deceso. En julio, en tanto, el abogado Sergio Coronado había revelado que los investigadores manejaban en esa época los nombres de posibles autores materiales del homicidio.
El hallazgo del cuerpo de Haeger, en agosto pasado, conmocionó a la ciudad de Puerto Varas, y desde entonces circularon múltiples versiones sobre su muerte. Familiares de la profesional habían planteado en varias oportunidades sus sospechas en torno al posible rol de Anguita en el homicidio.