El tiempo se agota y los principales nudos de la reforma laboral aún no se resuelven. El miércoles pasado, el Gobierno le puso suma urgencia al proyecto, es decir, debe ser despachado en un plazo máximo de 15 días.
Sin embargo, en la propia Nueva Mayoría no hay convergencia en varios de los ejes de la iniciativa.
Incluso, a algunos en el oficialismo les inquieta la advertencia que han hecho parlamentarios de oposición de acudir nuevamente al Tribunal Constitucional (TC) para presentar un recurso de inconstitucionalidad, tal como lo hicieron con el proyecto de gratuidad en educación superior.
Esta vez, los senadores Andrés Allamand (RN) y Hernán Larraín (UDI) han comentado que a lo menos la titularidad sindical y la extensión de beneficios tendrían visos de inconstitucionalidad, incluso más claros que los detectados por el TC en la glosa de gratuidad. Para trabajar en el requerimiento, contactaron al abogado constitucionalista Gastón Gómez, quien además de formar parte del Consejo de Observadores, es profesor de derecho constitucional en las universidades de Chile y Diego Portales, y forma parte de tuconstitucion.cl, iniciativa impulsada por el ex Presidente Ricardo Lagos.
Aún así, en el PS y el PC han pedido premura para despachar el proyecto que actualmente está en la Comisión de Hacienda del Senado que preside Andrés Zaldívar (DC), a quien han acusado de «dilatar» el envío de la iniciativa. «Seguir dilatando esto enrarece el clima dentro de la Nueva Mayoría», dijo esta semana el senador PS Juan Pablo Letelier, presionando para una tramitación expedita.
Zaldívar, sin embargo, ha insistido en que no es bueno «apurar» su discusión, lo que fue ampliamente criticado por parlamentarios socialistas y comunistas. «Si al senador Zaldívar no le apura el proyecto, bueno, es su opinión, pero a mí sí me apura porque yo me dedico a defender y representar a los trabajadores. Cada uno aquí responde por los que representa», dijo el jueves el presidente de la Comisión del Trabajo de la Cámara de Diputados, Lautaro Carmona (PC).
Ante esto, Zaldívar planteó ayer que se debe tomar el tiempo que sea necesario. «Yo también defiendo a los trabajadores y no quiero compararme con nadie, pero no es que haya o no apuro, el tema es que las cosas se hagan bien y se tome el tiempo que sea necesario. No quiero que tengamos el mismo cuadro que tuvimos que soportar con motivo de la glosa presupuestaria en gratuidad con la reforma laboral», dijo.
El parlamentario ha advertido que el Gobierno debe ser «muy cuidadoso» con los aspectos de constitucionalidad de la reforma laboral.
Además, el senador DC fue enfático en decir que no está «retrasando» la tramitación de la iniciativa, como algunos han asegurado. «Estoy esperando que el Gobierno me indique sus preferencias. Yo no estoy gestionando nada, no estoy haciendo ninguna negociación sobre el tema», dijo.
Ayer, en tanto, los ministros Rodrigo Valdés (Hacienda) y Ximena Rincón (Trabajo) se reunieron en las dependencias del Ministerio del Interior, en La Moneda, para continuar analizando los detalles de la reforma.
En la DC, el tema será visto el lunes en el consejo nacional, mientras en el PS será revisado hoy, en el pleno del comité central que se realizará a partir de las 10:00 horas, en el ex Congreso.